03 diciembre 2012

...ya he leído: Bulevard dels francesos, de Ferran Torrent

SINOPSIS

Valencia de principio de los sesenta y el momento actual. La vida de los Baixauli está marcada por la muerte del padre, maqui desaparecido tras la guerra civil, y su ideología, son un ejemplo para el mayor de sus hijos, Josep, quien milita en el clandestino Partido Comunista, a pesar de salir con una joven modosa y tradicional a la que no le habla de política para que no se le asuste.
Teresa, hija de una familia burguesa, y Felo, camarero irremediablemente enamorado de una vedet, son dos de sus camaradas que comparten la visión de que el PC está actuando con un guión que no es el que le conviene al país, por lo que buscan acciones más contundentes que demuestren que hay ganas de cambio y dinamizar a la sociedad.
La investigación del asesinato de una rica heredera de la que es testigo un ladrón de guante blanco con mala suerte, tendrá consecuencias directas en la vida de estos jóvenes, ajenos a los problemas con los que se encontrará el comisario Piñol encargado del caso hasta que es apartado por la presión ante la falta de resultados rápidos, pasando al jefe de la Políticosocial, más centrado en cerrar el caso que en solucionarlo.

COMENTARIO
Meritorio trabajo estructural que realiza Ferran Torrent en esta novela de intergéneros novelísticos. Desarrolla unos personajes con un interesante planteamiento en la voz narrativa y una interrelación que estalla en el cruce de una trama político-social y una trama policiaca. A lo mejor, más que trama no se queda más que en argumentos un tanto escénicos que se hilvanan, con unos diálogos muy bien construidos. La cuestión policiaca es bastante previsible en el desarrollo, pero queda claro que el objetivo de Torrent en esta ocasión no es tanto dar con la mejor novela negra sino más bien adentrarnos en los calabozos físicos (los de las comisarias policiales) e ideológicos (el partido comunista) de la España de finales de los 50-inicio de los 60.
La cuestión política y policiaca se conjuga con una narración en primera persona situada en nuestros días (en plena burbuja inmobiliaria de los años 2000, cuando está apunto de empezar a petar), un personaje que se tarda media novela en identificar en relación a la trama del pasado va reflexionando sobre trocitos de su realidad, marcada por los hechos familiares pretéritos y por la visión nihilista y un tanto destroyer de una sociedad en nuestros días que no se sostiene en ningún ideal. Unos seres que se amparan en una solidaridad desesperada de fracasados sin rumbo, sea cual sea su origen y su procedencia.


29 noviembre 2012

...ya he leído: Casa desolada, de Charles Dickens











SINOSPSIS

Esther Summerson, abandonada al nacer por sus padres, es la protegida de John Jarndyce, un poderoso gentleman de buen corazón que lleva años pleiteando a causa de una herencia. Esther vive en la residencia de Jarndyce, Casa Desolada, desde los dieciocho años, junto con Ada y Richard, primos adolescentes de John, huérfanos e indigentes a causa de la disputada herencia, a los que éste trata de orientar en la vida. La novela gira en torno a los avatares biográficos de Esther –cuyo relato en primera persona se intercala con el del narrador–, siempre luchando por encontrar su identidad, superar su origen y mejorar socialmente. 


COMENTARIO

El argumento se desarrolla en torno a un polémico juicio, Jardyce contra Jardyce, que se prolonga a lo largo de los años arruinando la herencia motivo del litigio y pasando de padres a hijos sin que haya un veredicto. La trama arranca en el momento en que el personaje principal, Esther Summerson, una chica huérfana que desconoce sus orígenes, se traslada como acompañante de dos huérfanos, Ada y Richard, en casa del señor Jardyce. Todos ellos están relacionados de una manera u otra con el desgraciado pleito, y no podrán impedir que influya en sus vidas desde el principio de la novela, la Cancillería planea como un designio oscuro sobre la vida de los protagonistas y se cuenta como desde los inicios el juicio ha corrompido a todo aquel que se ha visto involucrado en el mismo.
La descripción de personajes, lugares y ambientes en la Inglaterra victoriana en la que la incipiente Revolución Industrial ha atraído a las ciudades a multitud de campesinos que sobreviven en condiciones miserables, ofrece a Dickens la posibilidad de ejercer con maestría la crítica, muchas veces irónica, de todo lo que a su alrededor no le parece ético: las enormes diferencias sociales, la altivez de las clases altas, la explotación de los humildes, la usura, la situación de los barrios marginales, la hipocresía de unas personas que viven de apariencias, la lentitud, vacuidad y arrogancia del aparato judicial, los movimientos feministas, la burocracia, etc, etc.
El ciclo vital al completo puebla la narraciónbebés, los niños, las jóvenes casaderas, las mujeres ya casadas, madres acompañadas de sus hijos, los hombres trabajadores, los hombres que dejan el trabajo, la ancianidad. Desde los más jóvenes y pequeños hasta los más mayores, Dickens no deja ningún arco de la vida sin dibujar o apuntar. Maravillosa la ternura con la que toca la infancia (inolvidable el personaje del pequeño Jo) y la feminidad. 
Resulta verdaderamente genial el trato de algunos aspectos de la trama relacionados con las mujeres, con esa doble identidad femenina que representan Lady Dedlock y Mademoiselle Hortense. O ese triste pero delicadísimo personaje que es la Señorita Flite, imprescindible para la comprensión del patético Richard Carstone. O la sensibilidad con la que toca la perdida del recién nacido en el personaje de Jenny, importantísimo personaje en la trama sobre la oculta maternidad de Esther Summerson. Caddy Jellyby también es un personaje femenino maravilloso, con esa madre con ocupaciones filantrópicas tan importantes que la dejan por completo fuera de la vivencia familiar, dejando todo desatentido emocional y físicamente. Caddy sólo necesita que la quieran puesto que en su casa nadie la ha querido y eso es tan fácil de comprender... De hecho es Ada Clare el personaje femenino que me parece más insulso y menos verosímil de toda la novela (no se puede obviar que Casa desolada está poblada de personajes curiosos y algunos grotescos). Esther supera una arrolladora vivencia emocional, a la que se le suma una penosa vivencia física cuando sufre la escarlatina por lo que Esther merece ser considerada un gran personaje literario. Esther es la figura que da unidad a la doble trama de Casa desolada, sólo ella consigue unir el laberinto kafkiano de Chancery y la tragedia de su madre, Lady Dedlock. La voz narrativa de Esther Summerson es muy completa, es un gusto llegar a ella para descubrir el avance de la trama desde el narrador testimonio que ofrece la información (el relato es restrospectivo, Esther narra los hechos ya pasados) sólo cuando le parece más conveniente. Las ironías retóricas de Casa desolada se concentran casi todas en los capítulos del narrador anónimo. Dickens excluye la abierta ironía de la narración de Esther hasta que ella está bastante fuerte y curada para emitir sus propios juicios irónicos, que finalmente dirige contra Skimpole y otros. Los diálogos de la obra también demuestran la maestría de Dickens.  

04 septiembre 2012

...ya he leído: Aire de Dylan, de Enrique Vila-Matas

SINOPSIS

«Al igual que Dylan mi padre fue un raro», dice Vilnius, más conocido como el pequeño Dylan, mezcla del cantautor americano y Rimbaud, convencido de que el fantasma de Lancastre, su difunto progenitor, le está traspasando sus recuerdos y clama venganza. Mientras el joven Vilnius se dedica a completar su Archivo General del Fracaso, busca a alguien que reconstruya las memorias de su padre y funda la infraleve y muy ligera sociedad Aire de Dylan, cuyos miembros intentarán desenmascarar a los asesinos de Lancastre en el transcurso de una representación teatral. La nueva novela de Enrique Vila-Matas es un homenaje al mundo del teatro y una divertida e implacable crítica del postmodernismo, contada a través de la relación de un padre y un hijo que personalizan el duro contraste entre la cultura del esfuerzo y el creativo arte de encogerse de hombros y no hacer nada, como Oblomov, el personaje «radicalmente gandul» de la literatura rusa.


COMENTARIO
He leído poco Vila-Matas, pero he conocido esa época en la que se le ha considerado un autor de culto, un autor metaliterariamente clave. Tanto ha sido esta época de “moda Vila-Matas” que he asistido dos veces –que yo recuerde bien- a tertulias en las que él era uno de los ponentes. La primera fue en CaixaForum con Javier Marías, uno se proponía seguidor del Real Madrid y el otro forofo del Barça. Los allí presentes éramos meros “escuchadores” de un diálogo sobre cómo seguían el fútbol dos escritores relevantes de la literatura española contemporánea. Una verdadera chorrada (y me resultó más simpático Javier Marías, a pesar que éste era el seguidor de Real Madrid). El segundo evento fue, exactamente, un acto de presentación del que era en aquella época su último libro (Dublinesca? Ni siquiera recuerdo el título en cuestión!). Tenía lugar en la facultad de filología de la Universitat de Barcelona y, por aquel entonces, yo misma cursaba los estudios de Teoría de la Literatura y Literatura Comparada, por lo que asistí como varios de mis compañeros de estudios. Bueno, aquello fue otra chorrada, sinceramente, aunque estaba más dibujado en el interés literario de su obra. Después de hacerle la pelota un buen rato, el moderador y otros oradores con el mismo Vila-Matas, le preguntaron a éste qué podía aportar sobre aquello que había motivado la escritura de la obra. Vila-Matas no quiso dar ninguna razón sobre sus motivos ya que, argumentaba, cada lector supone libremente sobre aquello que ha conducido a a la escritura o, por el lado de la crítica (contando que muchos de los que estábamos allí presentes queríamos aspirar a hacer crítica literaria con un cierto rigor, u otros a escribir) que acostumbra a disponer la revocación de ciertas declaraciones o insiste sobre el hecho imponderable que si pretendía escribir sobre x o sobre y, en realidad estaba escribiendo sobre w o sobre z. Para qué hablar sobre algo que en realidad no acababa resultando, según parece, nada indispensable (por no decir totalmente dispensable), puesto que cada uno de nosotros (seamos lectores, seamos críticos) compondríamos nuestras propias suposiciones, elaboraríamos nuestras propias razones.

Aire de Dylan intenta tocar temas de importancia en el ciclo vital de cada uno de nosotros, como la muerte, la pérdida y el duelo por aquellos seres más queridos (o no, ironiza sin duda Vila-Matas), sobre el esfuerzo en el trabajo… Estos son los temas principales de la obra, pero me parece que, teniendo momentos de verdadero interés tanto por la construcción “teatralizada” de la ficción que nos presenta, como por numerosos apuntes literarios y metaliterarios que realiza, la obra no llega a ser verdaderamente transcendente. No creo que nadie vaya a perderse nada si no lee esta novela. Ni siquiera me parece interesante el recorrido que hace por las calles de Barcelona, ni sus referencias a la ciudad. Debo confesar que mi única lectura de Vila-Matas hasta el momento, París no se acaba nunca, me resultó radicalmente diferente. Aquello consejos que Marguerite Duras le da en el piso de París al joven escritor en formación para escribir bien me parecen todavía tan memorables, que los apuntes de Juan Lancastre y la respuesta discursiva que elabora este escritor-narrador protagonista no han reunido esa emoción en la lectura. Sí, sí, abunda una intertextualidad trabajada, desde el mismísimo Shakespeare de Hamlet, pasando por la literatura norte-americana de Scott-Fitzegarld, llevándonos a citaciones directas de obras de Philliph Roth, o de Sergio Pitol,… y, por descontado esta presente en toda la obra una profunda reflexión sobre la experiencia en cada uno de nosotros de la conjunción (afortunada o no) de la realidad y la ficción para interaccionar como entes sociales, sin el menor género de dudas, discursivos. O, dicho de otra manera, especula sobre la necesidad de establecer imposturas para sobrevivir o, en la mayoría de las ocasiones, sencillamente sobrevivirnos. Pero lo terrible del caso es que no va a pasar nada si uno no lee Aire de Dylan y se pierde todas estas representaciones, todos estos apuntes. A veces incluso parece que el propio Vila-Matas se excusa, cuando insiste tanto en explicar porque su escritor narrador-protagonista (alter-ego en ocasiones?) acepta escribir las memorias apócrifas de Juan Lancastre. Lo explica tanto que parece Vila-Matas que nos insiste sobre las razones que le han llevado a escribir esta novela (¡claro, como luego no quiere aclararlo en las presentaciones de sus libros, ni siquiera en términos académicos en la Universitat de Barcelona!”). También quiere decirnos que ha decidido dejar de escribir, que se arrepiente de haber sido un tanto prolífico, y que quedará mudo incluso en la vida familiar con su esposa (esto debe de ser una ironía romántica, obvio, porque Roland Barthes ya hace mucho tiempo que mató al autor y no debemos reconocerlo en aquello que éste escribe en sus obras).
Eso sí, felicito a Enrique Vila-Matas por el luminoso ejercicio de crítica literaria que nos ofrece tan calladamente, tan quedo, pero de una forma tan esplendorosa, tan sólo escribiendo esto: “- ¿Quién soy? Me llamo Pedro Páramo como todo el mundo. Mi familia es aire y yo soy mezcla de las voces y recuerdos de distintos vivos y muertos.”, puesto que consigue evocar lo que requiere la comprensión hermenéutica de esta transcendental obra literaria, Pedro Páramo. Qué verdadera maravilla!

18 agosto 2012

...ya he leído: Rescate, de David Malouf

SINOPSIS
Hacia el final de la Guerra de Troya, Aquiles, furioso por la muerte de su compañero Patroclo a manos de Héctor, hijo de Príamo, rey de Troya, lo mata y profana su cadáver arrastrándolo con su carro alrededor de las murallas de Troya durante once días. Príamo decide rebajarse como ningún rey lo había hecho antes: arrodillarse ante su enemigo, el asesino de su hijo, y suplicarle que le devuelva el cuerpo de su hijo a cambio de un rescate.
En esta historia del encuentro entre Príamo y Aquiles, dos hombres poderosos devastados por la pena, que apenas ocupa unos versos de la Ilíada, David Malouf descubre una de esas «historias no contadas que encontramos en los márgenes de escritores anteriores», como reconoce él mismo al final del libro.

COMENTARIO
Me ha gustado mucho esta novela, breve pero interesante. Escrita desde la edad del autor y reflexionando sobre la edad de estos personajes del mito clásico de la Iliada.  Los ancianos Príamo y Somax, viajan juntos para visitar al joven Aquiles, que ya lleva luchando en Troya casi diez años. Los ancianos reflexionan sobre algunos momentos de su vida y sobre su relación con los hijos. Aquiles es padre de un hijo que vive lejos y que pronto viajara hacia Troya, también. Este análisis pausado sobre el ciclo de la vida y sobre aquello que la vida requiere a ciertas personas que se deben a lo que representan: Príamo como rey y jefe de Troya, Héctor como principal hijo del rey, Aquiles como héroe marcado ya desde su nacimiento, el carretero Somax como el heraldo Ideo.
Una verdadera delicia.

01 agosto 2012

...no he conseguido acabar de leer: Chesil Beach, de Ian MacEwan

SINOPSIS
Tienen poco más de veinte años y se conocieron en una manifestación en contra de las armas nucleares. Florence es una chica de clase media alta. Edward, en cambio, pertenece a una familia que vive en la zona baja de la clase media. Ambos son inocentes, y vírgenes, y tras un largo cortejo se han casado. Es un día de julio de 1962, y el tsunami de la revolución sexual no ha llegado a Inglaterra. Edward y Florence van a pasar su noche de bodas en un hotel junto a Chesil Beach.

COMENTARIO
Pienso que es posible que el elemento generacional sea un factor a tener en cuenta en el primer contacto con Chesil Beach. Pero, en todo cas, la construcción del análisis psicológico de sus dos protagonistas no acaba de estar igual de bien resuelto. O igual es tan reflexivo (sobretodo en lo referente al personaje femenino) que acaba resultando un tanto paralizante. He tenido que ir al final del relato para leer lo que expresaban finalmente éstos personajes en voz alta (o sea, sólo buscaba el diálogo, lo demás lo pasaba de largo) sobre aquello que parecía que les estaba sucediendo. Me aburrían todos sus pensamientos y la evocación de todas esas vivencias (que no he acabado de entender muy bien si realmente era tan respresoras por lo artificiosas), y McEwan insiste en hacer interesante (busca las redondeces de unos moldes bastante angulosos) a esa mujer a la que finalmente su POBRE marido le dice, "pero tu eres una verdadera frígida!!", osti, esta palabra ahora no se escucha nada, pero sé que antes sí... El final final lo sobreleí un poquito, porque me gustaría desembocar en la narración como dios manda, leyendo todo de nuevo... pero me ha parecido como que Edward, tras el paso de los años, pensaba que igual no había sabido entender a Florence, o que no le había dado tiempo suficiente a la relación o que no había esperado a hacer juntos un aprendizaje sexual que hubiera desembocado en una comprensión  mútua, no sé.. algo así... pero ahí está precisamente el quid de la juventud  como momento de nuestras biografías: todo se vive de forma más espontánea y ligera --por suerte!!--, de forma que no sé... igual os encanta lo que dice al respecto Eduardo Mendoza.

27 julio 2012

...he visto: The Master and Margarita, dirigida por Simon McBurney


En el GREC 2012 se ha podido asistir a una propuesta escéncica  de  gran calibre compositivo e interpretativo. Se trata de una coproducción de Complicite, The Barbican London, Les Théatres de la Ville de Luxembourg, el Wiener Festwochen, el Ruhrfestpiele Recklinghausen i el Festival de Avignon en colaboración el Theatre Royal Plymouth.  El director es Simon MacBurney.
Interesantísima propuesta escenográfica la de ésta adaptación de la obra de Mijail Bulgákov, El Maestro y Margarita. Salí bastante conmocionada por el conjunto del espectáculo y por el tour de force que reclama la comprensión herméneutica del texto.
Fui a la función desconociendo los integrantes del elenco y la verdad es que me ha satisfecho haber reconocido a un estupendísimo César Sarachu en,  entre las direferentes modulaciones en el esquema escenográfico de la obra, sus papeles de Cristo y de Woland.  
Ha sido una maravillosa experiencia teatral.      

03 julio 2012

...ya he leído: Push, de Sapphire

SINOPSIS
Precious Jones tiene dieciséis años, es negra y casi analfabeta, y espera sus segundo hijo. El primero lo tuvo a los doce años, y el padre de ambos es su propio padre. Forzada a abandonar la escuela a causa de su último escándalo, Precious acaba en un insitituto para casos desesperados, allí conoce a la señorita Rain con la que tendrá la oportunidad de recuperar la dignidad.

COMENTARIO
Decidí leer el libro después de ver la película Precious de Lee Daniels y mirar un poco sobre la novela en que se basaba. La obra tiene unas 180 páginas y se puede leer de un tirón. 
Esta novela es dura en relación a su temática y, la verdad, me parece que por desgracia se queda algo anclada en unas coordenadas espacio-tiempo muy propias de los años '80 (s. XX), aunque aquello que debe calar con más profundidad sea una reflexión sobre la vertiente más pervertida de la condición humana. En todo caso, la obra más allá de la visualización del degradado y, por tanto, tremendamente doloroso acceso a la sexualidad de numerosas mujeres de toda raza y condición (hay que llegar a la reunión de víctimas del incesto) se trata de una reflexión sobre la alfabetización, del acceso a la más primera escritura y, posteriormente, a la más primera lectura, para construir un mundo en el que podamos primero recibirnos a nosotros mismos para, sólo entonces, lograr que los demás nos reciban.
Los pasajes en que Precious empieza a memorizar el alfabeto y, poco después, pasa a escribir su diario dirigiéndose a la señora Rain me han parecido realmente estupendos. Precious incluso escribirá poesía.

De una madre a un hijo

Bien, hijo, te lo digo:
la vida, para mí, no ha sido una escalera de cristal.
Ha sido una escalera
llena de clavos y de astillas
y de tablas rotas
y de sitios de suelo sin alfombras,
desnudos.
Y todo ha sido
subir
y llegar a descansillos
y torcer esquinas
y a veces avanzar en la oscuridad,
donde no hay ninguna luz.
Así que, hijo mío, no retrocedas.
No te quedes sentado en los escalones
al ver que el ascenso es más bien duro.
No desfallezcas ahora...,
porque yo sigo, cariño,
yo sigo subiendo,
y la vida para mí no ha sido una escalera de cristal.

02 julio 2012

...ya he leído: Caligrafía de los sueños, de Juan Marsé

SINOPSIS
A mediados de los cuarenta, Ringo es un chiquillo de quince años que pasa las horas muertas en el bar de la señora Paquita, moviendo los dedos sobre la mesa, como si repasara las lecciones de piano que su familia ya no puede pagarle. En esa taberna del barrio de Gracia, es testigo de la historia de amor entre Vicky Mir y el señor Alonso: ella, una mujer entrada en años y en carnes, masajista de profesión, ingenua y enamoradiza; él, un cincuentón apuesto que empezó frecuentando a la mujer para curarse de una lesión en el pie y ha acabado instalándose en su casa. Allí viven junto a Violeta, la hija de la señora Mir, hasta que sucede algo inesperado: un domingo por la tarde, Vicky se echa a las vías de un tranvía intentando un suicidio imposible y patético, mientras el señor Alonso desaparece para no volver. Lo único que queda de él es una carta que prometió escribir y que Vicky estará esperando y deseando hasta la locura, mientras Violeta mueve sus espléndidas caderas por el barrio, hosca e indiferente a los halagos. La vida entera discurre por el bar de la señora Paquita y bajo la mirada de Ringo, que escucha, lee, y finalmente empezará a escribir, llenando de luz esa triste caligrafía de toda una generación que alimentó sus sueños en los cines de periferia y en las calles grises de una ciudad donde el futuro parecía algo improbable.


COMENTARIO
La sinopsis que he reproducido, que se toma de la nota que Lumen añade en su publicación dice "llenando de luz", hombre yo no diría que Ringo llena nada de luz, aunque la escritura será sin duda la única vía de salida satisfactoria que Ringo encontrará de su infancia-adolescencia gris y un tanto extraña. Para mí Ringo tiene un exceso de trato contemplativo (tanto en el talante que toma el personaje para conducirnos por la narración, como en la posición que el autor parece tomar con respecto a su propia construcción) que me ha disgustado. La verdad es que no me ha convencido La Caligrafía de los sueños de Marsé.  Marsé apunta un dibujo de la presuntamente necesaria impostura para sobrevivir a aquella dura etapa histórica de España y a mí Ringo, en realidad, me parece un mentiroso de tres al cuarto que inventa e inventa para hacerse ver en un entorno social donde resulta complentamente invisible. Incluso narrando sus aventis con los amigos resulta artificioso. La revisión de aquellos años, en esos apuntes de Marsé que algunos definen como sociológicos, me han aburrido un tanto en esta novela. Ese tono excesivamente contemplantivo provoca que las notas de la Historia no resulten relevantes en la historia del relato. En fin...
Cuando leí Si te dicen que caí, obra que recuerdo con gran interés, ya encontré que el dibujo femenino estaba trazado bajo una paleta poco favorecedora a la condición de la mujer y esa actitud de prepotencia de los varones respecto de las mujeres que es mucho menor y muchísimo más moderna en esta obra, choca con el trazo claramente grotesco de las protagonistas de la narración. Vicky y Violeta son dos pequeños engendros femeninos uno tocado por la locura y otro tocado por la fealdad, aunque una la subsane con una inconmensurable ternura ante la desesperada búsqueda de la felicidad y la otra con esa interesante pulsión sexual de una niña que ya está a punto de ser una verdadera mujer y que despierta la locura en los hombres que la rodean.
Por supuesto luego está el subtema de los ganadores y los vencidos. Los padres de los jóvenes: uno que caza ratas azules y el otro, al que habían hecho alcalde le barrio, que se vuelve loco y acaba internado en un sanatorio. En este aspecto Marsé se ha mantendio más modesto y ha dibujado breves trazos, el interés de la trama no ha ido en ningún momento por ahí. 
La trama... bueno, el concepto trama parece incluso algo excesivo. Se producen unas peripecias muy determinadas, muy concretas, entre los personajes en un periodo de tiempo breve (aunque la analepsis de los recuerdos nos lleve hasta el día del nacimiento de Ringo, en lo que se explica como una reproducción de las circunstancias de la vida real del propio Juan Marsé) y Ringo nos ofrece su visión (ya he dicho que en exceso contemplativa?) del cuadro que se está pintando.  En algún sitio he leído que "novela de formación", pero vamos... ni de broma se trata de una novela de formación. A lo más un intento de reflexión sobre la impostura que ha de tomar el escritor para crear su propios personajes, para construir su ficción literaria. Este elemento sí que me parece que insinuado en diversas ocasiones y creo que se debe de tomar en cuenta. Parece que Marsé sí que quiere reflexionar sobre las razones que le invitaron a escribir,  pero parece quedarse demasiado clavado en mirarse a sí mismo, mirando a eso que en el lenguaje literario se llama el álter ego.

03 junio 2012

...ya he leído: El señor Pip, de Lloyd Jones



SINOPSIS

Hacia 1991, durante los primeros compases de la guerra civil que asoló la remota isla de Bougainville, la joven Matilda y su madre viven solas ante la ausencia del padre, que debió emigrar tras perder su trabajo en las minas de cobre. Entre quienes se quedaron en la isla está el señor Watts, un excéntrico hombre blanco que un buen día decide reabrir las puertas de la escuela y ejercer de maestro. Su método es combinar la lectura en voz alta de capítulos de Grandes esperanzas, su novela favorita de Charles Dickens, con la intervención de las gentes del pueblo que quieran compartir consejos prácticos acerca de cómo sobrevivir en su entorno. De esta forma, el improvisado maestro logra atrapar el interés de sus jóvenes alumnos, cautivados por las aventuras y desventuras de Pip, el joven huérfano protagonista de la novela de Dickens. Para Matilda, Pip es tan real como su madre, alguien que además de ofrecerle orientación y consuelo se convierte en la amistad más fecunda e importante de su vida. Sin embargo, en un país en guerra, el poder de la imaginación puede ser visto como una provocación peligrosa.

COMENTARIO

La novela de Lloyd Jones pretende tender puentes entre dos épocas muy diferentes y dispares, y demostrar cuántos factores todavía nos relacionan con el pensamiento y los patrones de comportamiento entre un siglo y el precedente. El éxodo rural fue uno de los temas que mejor retrató Dickens en el s. XIX: sus grandes historias versan sobre los sufrimientos de los desplazados en las grandes ciudades en la era victoriana, así como la relación de las nuevas clases medias con el incipiente sistema capitalista. Aunque en otro hemisferio y en otro siglo (el s. XX), no es muy diferente a los sufrimientos de Matilda y su comunidad: afectados por la falta de escrúpulos de una compañía minera, por las guerras sangrientas y la abuso de poder, el único destino que les queda a estos campesinos es trasladarse a zonas urbanas.Durante la época victoriana era común que las novelas -publicadas por entregas- fueran leídas a toda la familia por un integrante, preferentemente el padre. Grandes esperanzas aterriza en las mentes de los alumnos de Bouganville mediante la lectura en voz alta del señor Watts. La narración oral, de hecho, es una pieza fundamental en la novela de Jones, y esto le permite al maestro tergiversar ciertos pasajes de la historia para adaptarla a los infantiles oídos de sus alumnos, así como dar voz a los relatos y anécdotas de la gente del pueblo, más ligada a sus ancestros.Hay dos aspectos preponderantes que tienden puentes entre los dos mundos y las dos obras: en primer término, la búsqueda de la identidad, en segundo, el poder la palabra como salvador y generador de vida. Tanto Pip como Matilda experimentan la desaparición de todo lo que configura su individualidad: ya desde la primera infancia, Pip pierde su familia y su nombre original. En el caso de Matilda, poco a poco desaparecen sus pertenencias, casa, su madre y su mentor. Ambos son trasplantados a una nueva tierra, donde han de reinventar, adaptar su yo original al contexto en que se desarrollan. En este sentido, ambas novelas son un bildungsroman. Jones juega con efectos originales, como la transmisión de diferentes tipos de relatos para cuajar finalmente la identidad de su protagonista, quien terminará escribiendo su propia historia. No hay que olvidar que lo que leemos no es el testimonio directo de una joven adolescente, sino el de una mujer adulta que ha viajado a Londres, que acaba de vivir una depresión, y ya puede contar su dolorosa vida para volver a casa.

El arco temporal de la trama en la que se centra las vivencias relativas al conflicto bélico ocupa tres años: "El bloqueo se impuso la primera mitad del 1990" y es en septiembre del año 1993 cuando la joven protagonista es atendida por los médicos de Honiara, la capital de las islas Salomón. Los capítulos que recogen la vida del Sr.. Watts, que él mismo explica durante seis noches en el momento que los Rambos ya han bajado al pueblo, ofrecen un haz temporal bastante importante para la comprensión de este personaje y, sobre todo, de la percepción que tiene Matilda. Este eje temporal concluye con la visita de la joven a June Wats, al final de la novela.Sin embargo, Lloyd Jones ofrece una distribución temporal interna muy original, ya que a pesar de ser primariamente lineal, se podría agrupar el desarrollo del tiempo narrativo en epígrafes relacionados con la forma como se desarrolla la aproximación y la comprensión a la lectura. Expongoalgun  ejemplo: "la primera lectura de Grandes esperanzas", "Las enseñanzas de los adultos en la escuela", "la desaparición de los libros", "la relectura de Grandes esperanzas a través de los recuerdos", "las historias nocturnas del Sr. Watts".Jones plantea una oposición conceptual entre los espacios abiertos que hablan de una isla paradisíaca que ha quedado indefensa ante una terrible guerra, y los espacios de la vida íntima, llenos de una intensidad tocada por la interiorización de lo que cada uno conoce mejor y que visualiza el desconcierto vital de todos los personajes: la escuela, las casas (la colonial casa de los blancos y las pequeñas casas del pueblo que son destruidas cuando bajan los Rambos), la iglesia, ... Desde esta perspectiva, la antagónica relación entre el Sr. Watts y Dolores (los espacios y los entornos vitales que representan) es el elemento mejor construido por el autor. Culmina esta correlación de oposiciones en la aproximación que cada uno de estos personajes hace de la barca de huida del padre de Gilbert. Y será precisamente este espacio pequeño el que inesperadamente proporcionará la salida al personaje principal de la novela, a Matilda.

19 mayo 2012

...ya he visto: La nieves del Kilimanjaro, de Robert Guédiguian

SINOPSIS
A pesar de haberse quedado sin trabajo, Michel es feliz con Marie-Claire. Hace 30 años que se aman. Sus hijos y sus nietos les miman. Tienen muy buenos amigos. Se enorgullecen de sus luchas políticas y sindicales. Sus conciencias son tan transparentes como sus miradas. Pero su felicidad se hará pedazos cuando dos hombres armados y enmascarados les agreden, les arrebatan los anillos de boda y huyen con las tarjetas de crédito.

COMENTARIO
Estoy todavía plenamente conmovida por el golpe emocional que ha supuesto para mí esta maravillosa película, Las nieves del Kilimanjaro, de mi -desde siempre- admirado Robert Guédiguian. Como ahora no tengo tiempo de hacer un comentario más extenso, dedico estas líneas a recomendar su visión a todo el mundo!! 
Cómo llenan la pantalla los actores, especialmente Jean-Pierre Darrousin. Qué inteligente me ha parecido Guédiguian con esos niños tan adorables (Martin y Jules) que justo a su hermano mayor (Christophe, siempre con la misma chaqueta deportiva azul) no han caido en esa vertiente más ultra-social, más enganchada a lo deprimentemente pobre que hay en todas las grandes cuidades, que sí hemos visto en otras peliculas.   
Pelicula realizada desde una poema de Victor Hugo.
Cine necesario. 


07 mayo 2012

...ya he leído: Los Príncipes de Maine, Reyes de Nueva Inglaterra [Aka: Las normas de la casa de la sidra], de John Irving


SINOPSIS
Situada principalmente en las décadas de los 40 i 50 del siglo XX, cuenta la historia del Dr. Wilbur Larch -santo varón y obstreta, éteradicto y abortista, director de un orfanato- y la de su huérfano favorito, Homer Wells, que nunca consigue ser adoptado de forma definitva. El Dr. Larch se plantea la disyuntiva moral de liberar a las madres pobres de un embarazo no deseado, antes que admitir en un asilo a sus hijos abandonados, y acepta ambas decisiones para el descanso de mujeres sin capacidad de maniobra vital, sin capacidad de decidir. Homer Wells, a quien Larch quiere como a un hijo, quiere ser de "utilidad" cuando su vida se ve centrada en el orfanato y al conocer "el Camino de Señor" y "el Camino del Diablo" se niega, en cambio, a «acabar con una vida humana». Homer se verá llevado a un verdadero camino de crecimiento personal cuando, tras conocer a una brillante pareja de jóvenes que visitan el orfanato de St. Cloud's, sale de allí para empezar una nueva vida. Irving sigue a varios personajes peculiares, todos mal nacidos, marcados por su extrañeza en esta tierra, pero todos héroes, auténticos príncipes y reyes de su propia existencia.

COMENTARIO

Llevo días pensando en el análisis de esta novela que he leído como una verdadera bocanada de aire fresco, que captó mi atención de forma plena y que, después de sus primeras 235 páginas (los cinco primeros capítulos) en una lectura pausada y reconocida (gracias a la versión cimenatográfica de Lasse Hallström, con guión firmado por el mismo John Irving), me absorvió de un tirón en las restantes 350 (624 páginas en la versión de Tusquets de la colección Fábula, de febrero de 1996). Leer así, de forma absorvente y con necesidad de saber qué va a pasar, qué reclaman esos personajes ha sido un verdadero regalo. Me gusta leer así de entregada a la lectura.
Pero ya en el análisis de aquello que representa una verdadera y loable defensa del tema del aborto en las clases pobres que no pueden asumir la carga económica y emocional que un niño supone, me ha dado un poco de pena que este libro que pudiera profundizar al respecto de la condición humana (de hecho, por momentos, parece que sí que va a hacerlo) se quede en un retrato algo postizo con la única finalidad de que su trama principal desemboque exactamente en los lugares que, arquitectónicamente, pretende hacer confluir Irving.
La recta honestidad emocional de los personajes principales, que viven en una constante confrontación de lo que es el yo más íntimo y lo que reclama el yo más externo, acaba resultando algo articiosa. Pero claro, estos personajes sólo pueden moverse en la novela de esa forma tan marcada, para que ésta funcione de forma plena, para que la lectura sea totalmente modélica en su resultado final. Homer Wells, Wilbur Larch y Candy resultan sorpendentemente íntegros; Enfermera Edna, Enfermera Angela y la Sra. Grogan viven ínsolitamente conformes con su inusual modo de vida (por lo entregado de ésta) en el orfanato de St. Cloud's durante años y años, incluso cuando San Larch ya es un anciano nonagenario. Ahí tenemos el fascinante personaje de Melony (-Te quiero a tí -dijo Melony-. Pero nunca me abandones. p. 448), la única que parece tener una entidad más material pero que está desgraciadamente tocada por una violencia física y emocional que la hace detestable, incluso como personaje literario. Una efectivo antihéroe que nunca podrá ocupar el sentido, ni desempeñar las funciones del héroe; una verdadera y radical antagonista. 
En definitiva, la novela se diluye en esta problemática tan habitual en las películas norteamericanas que sólo se preocupan del amor de la pareja, de la construcción de una familiar nuclear mínima y satisfactoria, y de cómo se relacionan sexualmente -la infidelidad siempre presente, por supuesto- los amantes en cuestión y las personas que los rodean. La trama desemboca en una cuestión temática más bien estereotipada (¿podrá el héroe obtener el amor de su amada, ante la oposición ético-moral que representa de la supervivencia del amante primero de ésta que ha marchado a la guerra y de la que vuelve totalmente tullido?) y aquello que parecía iba a convertirse en un legítimo cuestionamiento sobre la controversia del aborto (Wilbur Larch se posiciona claramente favorable y Homer Wells manifiestamente en contra), bueno, se convierte en una trama amorosa audaz y bien trabajada. Un buen libro, una interesante lectura, una pena que no cale un poquito más hondo en lo que plantea sobre las adversidades a las que se enfrenta la condición humana.
Las referencias a Charles Dickens: David Copperfield, Grandes Esperanzas y la Pequeña Dorrit, así como a Jane Eyre de Charlote Brönte, representan sobretodo un apunte metaliterario utilizado con inteligencia. Aquí la literatura está presente en la existencia de los huérfanos, pero no toma jamás el lado de la vida.  
Y el final de la novela... ¿en qué se convierte Homer Wells, en un impostor? (me fascina el tema de la impostura!) ¿O es totalmente legítimo que este niño que no había conseguido ser definitivamente adoptado, sea reconstituido por el mismo St.Cloud's en lo que es sin duda una triunfante adopción, orquestada durante años por el Dr. Larch, y sencillamente cambie su nombre cómo sucede con naturalidad a tantos niños huérfanos en el momento de ser afiliados?

17 abril 2012

...ya he leído: Nocturnos, de Kazuo Ishiguro

SINOPSIS
Éste es el primer libro de relatos del autor, reúne cinco historias que pueden leerse como estudios y variaciones sobre unos cuantos temas o como todo un concierto. 
En «El cantante melódico», un guitarrista de oficio reconoce a un vocalista americano y juntos aprenden una lección sobre el distinto valor del pasado. 
En «Come Rain or Come Shine», un maniaco-depresivo es humillado en casa de una pareja de antiguos progres que han pasado a la fase yuppie. 
El músico de «Malvern Hills» columbra su mediocridad cuando prepara un álbum a la sombra de John Elgar. 
En «Nocturno», un saxofonista conoce a una vieja artista de variedades. 
En «Violonchelistas», un joven prodigio del chelo encuentra a una mujer misteriosa que le ayuda a perfeccionar su técnica. 
Las cinco barajan elementos que son habituales en el autor: la confrontación de las promesas de la juventud y los desengaños del tiempo, el misterio del otro, los finales ambiguos y sin catarsis. Y la música, íntimamente relacionada con la vida y obra del autor. 

COMENTARIO
Este comentario no puede empezar de otra forma que confesando que me gusta cómo escribe Ishiguro, que disfruto con su forma de construir unas experiencias humanas de apariencia corriente pero que siempre están tocadas por el signo de lo desconcertante. Disfruto del viaje que siempre nos invita a hacer hacia lo particular de esas vivencias a través del dibujo fino y profundo (entiéndase bien como aquello que posee hondura) de la psicología de sus personajes.  Me recreo con el talento de Kazuo Ishiguro y me han fascinado estos cinco relatos relacionados íntimamente con la música y con aquellos que consiguen un intransferible disfrute de ésta. 
Los protagonistas de estas historias no son músicos corrientes, son personas que poseen un don musical y que se visonan -como a través de una mirilla- en un momento crucial de reajuste de su vida. Ciertamente, el desengaño del paso del tiempo, el arrepentimiento, las oportunidades perdidas, son elementos temáticos que ya han aparecido en las letras de Ishiguro, pero estos cinco nocturnos posseen un punto de absurdo -de algo sútilmente extravagante y sin aparente sentido- que los convierte en verdaderas invitaciones al deleite de la lectura. Hay algo tan disimuladamente absurdo en todas estas historias, que puede sudecer incluso que las leamos sin darnos la menor cuenta. Sin duda se debe de tratar de todo aquello disparatado que ya es corriente en la sociedad de nuestros días, como la incomunicación, la no aceptación del uno-mismo, el autoengaño que nos permite creer que seguimos siendo quienes probablemente tampoco nunca fuimos, en definitiva todas aquellas incoherencias pequeñas y sutiles que ya no podemos quitarnos de encima. 
Y la música de esos cinco nocturnos que nos acompaña de forma constante durante toda la lectura. Una verdadera maravilla. 

Billie Holiday -- Come Rain Or Come Shine

23 marzo 2012

Poemas de cine en CineBaix



Jules et Jim, de Ponç Pons

Era un cine petit, amb poca gent, i jo,
que vivia l’amor en cartes sempre urgents
on hi havia el carmí de besades cremants,
vaig sortir convençut que era cosa de dos
viure junts i em vaig perdre pels Champs Elysées.

D’aleshores encara en fascina el Truffaut
putejat de la infància a Les quatre cents coups,
de L’amour à vintg ans o de L’argent de poche.

Regne d’ombres m’assec a la cova i revisc
exultant amb Plató La nuit americaine.
Tots dos hem madurat, Antoine Doinel és mort,
però qui no tindrà a un París de nouvelle vague
juvenil La peau douce quan veu Baisers volés!

El cine era petit, amb poca gent, i jo,
que fugia enversat d’un país estantís
atufat de resclum, no record el seu nom.

Les butaques tenien un suau tacte verd
i el metro Chatillon-Montrouge, esperitat,
passava fent renou cada quinze minuts.

21 marzo 2012

21 de marzo: Dia Mundial de la Poesia




DIEZ DEFINICIONES DE POESÍA
por Carl Sandburg


1. La poesía es una proyección, a través del silencio, de cadencias adaptadas para romper dicho silencio con precisas intenciones de ecos, sílabas y duraciones de ola.

2. La poesía es el diario de un animal marino que vive en la tierra y espera volar por el aire.

3. La poesía es una serie de explicaciones de la vida que se esfuman en horizontes demasiado rápidos para explicaciones.

4. La poesía es una búsqueda de sílabas que han de ser disparadas contra las barreras de lo desconocido y de lo inconcebible.

5. La poesía es un teorema de un amarillo pañuelo de seda tejido con adivinanzas y encerrado en un globo atado a la cola de una cometa que vuela impulsada por un viento blanco en un cielo azul de primavera.

6. La poesía es el silencio y la conversación entre la húmeda y pugnaz raíz de una flor y el luminoso florecer de dicha flor.

7. La poesía es la enjaezada paradoja de la tierra meciendo a la vida y después enterrándola.

8. La poesía es la fantasmal escritura que explica cómo son hechos los arcoiris y por qué desaparecen.

9. La poesía es una síntesis de jacintos y bizcochos.

10. La poesía es el abrir y cerrar de una puerta que deja a los que miran pensando en lo que se ve durante un momento.

DEU DEFINICIONS DE LA POESIA

1. La poesia és una projecció, a través del silenci, de cadències arranjades per rompre aquest silenci amb precises intencions d'ecos, síl.labes i duracions d'oneig.

2. La poesia és el diari d'un animal marí que viu en terra i anhela volar per l'aire.

3. La poesia és una sèrie d'explicacions de la vida que s'esvaeeixen dintre d'horitzons massa ràpids per a explicacions.

4. La poesia és una recerca de síl.labes que han d'ésser disparades contra les barreres de l'inconegut i l'inconnoscible.

5. La poesia és un teorema d'un mocador groc de seda teixit amb endevinalles i tancat dins un globus lligat a la cua d'un estel que hom fa volar dins un vent blanc en un cel de primavera.

6. La poesia és el silenci i la conversa entre la humida i pugnaç arrel d'una flor i la florida lluminosa de la mateixa flor.

7. La poesia és la guarnida paradoxa de la terra gronxant la vida i després enterrant-la.

8. La poesia és el fantasmal escrit que explica com són fets els arcs iris i per què desapareixen.

9. La poesia és una síntesi de jacints i bescuits.

10. La poesia és aquell obrir i tancar d'una porta que deixa, als que miren, pensant en allò que es veu en un moment.