03 julio 2012

...ya he leído: Push, de Sapphire

SINOPSIS
Precious Jones tiene dieciséis años, es negra y casi analfabeta, y espera sus segundo hijo. El primero lo tuvo a los doce años, y el padre de ambos es su propio padre. Forzada a abandonar la escuela a causa de su último escándalo, Precious acaba en un insitituto para casos desesperados, allí conoce a la señorita Rain con la que tendrá la oportunidad de recuperar la dignidad.

COMENTARIO
Decidí leer el libro después de ver la película Precious de Lee Daniels y mirar un poco sobre la novela en que se basaba. La obra tiene unas 180 páginas y se puede leer de un tirón. 
Esta novela es dura en relación a su temática y, la verdad, me parece que por desgracia se queda algo anclada en unas coordenadas espacio-tiempo muy propias de los años '80 (s. XX), aunque aquello que debe calar con más profundidad sea una reflexión sobre la vertiente más pervertida de la condición humana. En todo caso, la obra más allá de la visualización del degradado y, por tanto, tremendamente doloroso acceso a la sexualidad de numerosas mujeres de toda raza y condición (hay que llegar a la reunión de víctimas del incesto) se trata de una reflexión sobre la alfabetización, del acceso a la más primera escritura y, posteriormente, a la más primera lectura, para construir un mundo en el que podamos primero recibirnos a nosotros mismos para, sólo entonces, lograr que los demás nos reciban.
Los pasajes en que Precious empieza a memorizar el alfabeto y, poco después, pasa a escribir su diario dirigiéndose a la señora Rain me han parecido realmente estupendos. Precious incluso escribirá poesía.

De una madre a un hijo

Bien, hijo, te lo digo:
la vida, para mí, no ha sido una escalera de cristal.
Ha sido una escalera
llena de clavos y de astillas
y de tablas rotas
y de sitios de suelo sin alfombras,
desnudos.
Y todo ha sido
subir
y llegar a descansillos
y torcer esquinas
y a veces avanzar en la oscuridad,
donde no hay ninguna luz.
Así que, hijo mío, no retrocedas.
No te quedes sentado en los escalones
al ver que el ascenso es más bien duro.
No desfallezcas ahora...,
porque yo sigo, cariño,
yo sigo subiendo,
y la vida para mí no ha sido una escalera de cristal.

2 comentarios:

  1. Emily13:14

    Gran poema!

    (Pasé de la película; no sé...)

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  2. Emily, sí que es bonito el poema, verdad? A mí me gustó mucho!!
    Sobre la peli, bueno, es un poco impactante desde el punto de vista temático. Yo la cogí en la biblio, con la colección del Speak Up, y no tenía ni idea de qué iba. Está prou ben feta, sin mucho más.
    Besos

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